viernes, septiembre 26

escudo, escupo

A lo mejor lo consigo,
después de todo,
a lo mejor lo consigo.
Eso de entender las calles,
de odiar la música
para no sentirte más,
de no amar lo
carnal,
lo animal.
Formar parte
de lo terrenal.
dejar de ser
humo
coraza
escudo.
A lo mejor lo consigo,
o quizás siga mintiéndome,
no lo sé.
por ahora;
No me mires a los ojos
que han aprendido a tejer.

domingo, septiembre 21

de ti, indigestión

Me hice un nudo
de inmasticables palabras
cuando respiré
octubre en
agosto
y diciembre
ya no tenía rey moro.
Entonces la poesía comenzó
a saberme
a carne
y dejé de comerla
y dejé de pensarte.
El altruismo en tu risa,
y yo obligándome
a no desvestirme
de ropas.
No habrá trampas
este enero
ni más juegos de idiotas,
Ahora que tú te pierdes
te embalas,
que tu silencio es
escudo
y mi grito sin uñas
no araña.

jueves, septiembre 18

in percepciones

se apaga el corazón y
se activan las neuronas.
He dejado de tener prisa
por escribir
y de pensar que al final
todo se trata de una musa.
siempre hablando
de escenarios
macabros
costillas
costuras
colillas
café.
y es que por no hablar de mí,
me inventé.

lunes, septiembre 15

primera persona, sin verbo

Enamórate de mi caos,
de mis libros.
Aprende a leer entre líneas.
Comprende
que yo no soy poesía.
No me juzgues,
no me esperes.
Desespera por mi,
si quieres.

domingo, septiembre 14

sin título III

diría
que yo al mejor
poema no le puedo dar forma
con palabras.
que el lenguaje
es veneno
cuando me quedo a oscuras
con la cabeza abierta
en cúmulos
de recuerdos
y noches más
que de ron,
de gaseosa,
que olvidé ser líquida
liquidando
a la musa con el corazón más
grande
y lleno de tela de araña.
que he aprendido a gritar
con la boca amordazada
y he sellado
con un beso un futuro cargado
de incógnitas.

viernes, septiembre 5

nunca seremos musicos

¿Recuerdas el nudo del que te hablé,
el que no tenía alma
y no me dejaba crecer?
Sigue ahí,
no me ha servido de nada
coserme las alas,
nunca he tenido valor
para volar hacia a ti
y decirte, vale, 
ya está bien
de buscar en otros ojos
al asesino de mayo,
vamos a dejar de hacernos daño,
de inventar un febrero
con cualquier músico o poeta.
Tú y yo nunca seremos en ningún hotel
ni viajaremos a la luna para devorarla.
Me duele el corazón de desquerer tanto,
de que se me atragante el amor
que sólo me dura un rato.
No me reconozco en otras bocas,
ni siquiera siento ser materia en el espacio.
He perdido el tren, ahora lo sé,
puede que mi destino no esté tan escrito,
y puede, también,
que no exista musa
para como ya dije una vez,
esta caja sin música.